Nombre que se da á varias substancias ó materias distintas mezcladas y ligadas, entre sí por medio de otra auxiliar ó por un sistema cualquiera de fabricación. En general se emplea para denominar en la industria carbonera los panes, ladrillos ó tortas que se fabrican con el carbón vegetal ó mineral.
La palabra no es castellana y la que pudiera ser su raíz, aglomerar, es antigua. Como se dice conglomerar debiera decirse conglomerado; pero toda la industria y el comercio han impuesto el vocablo que encabeza estas líneas.
No es muy antigua la fabricación de aglomerados, que en un principio se aplicó tan sólo á los hogares de las máquinas de vapor, pero luego se perfeccionó la industria con destino á los usos domésticos, y hoy, en la cocina, en los fogones y hornillas económicas se emplea ventajosamente el aglomerado hecho con el cok en polvo ó triturado.
Mezclando en proporciones convenientes ese producto con la arcilla y la brea depurada, se consigue un combustible que tiene todas las condiciones del cok, superándole en ventaja para encenderse y conservar el fuego.
Los primeros aglomerados para usos domésticos se fabricaron en Lieja (Bélgica) en forma cilíndrica de medio pie de largo por dos pulgadas de grueso. La calefacción en las chimeneas ó en los caloríferos de hogar abierto, fué la primera aplicación que tuvo el nuevo combustible, tan generalizado hoy, que en Francia, en Suiza y en el norte de Italia hay fábricas, desde hace tiempo establecidas, que con variedad en la forma y en la composición del producto lo han generalizado en los referidos países.
Por fortuna hay ya en España, y á la hora presente, industriales de alma y de capital que han empezado á propagar el nuevo producto, y en prueba de ello, la fábrica de aglomerados que se halla establecida en Madrid en el paseo de las Acacias, número 43, y que tiene su oficina central en la Carrera de San Jerónimo, núm. 51.
Estos carbones, así como los aglomerados de carbón de encina son realmente buenos. Las excepcionales condiciones que reúnen derivan de su fabricación, en que el prensado y la calcinación son las dos operaciones principales.
Ni producen tufo, ni se apagan, ni requieren un astillero para encenderlos.
La brea que contienen, y que es el agente que aglomera, purifica la atmósfera y hace preferible esta clase de carbones á todos los demás para los usos domésticos.
Para caloríferos, estufas y chimeneas no tienen precio los aglomerados de cok. Para la culinaria no tienen rival ni éstos ni los aglomerados de carbón de encina.
En la cocina se consumen totalmente y en los hornillos económicos —sistema Angel Muro— los de cok, cuando están bien encendidos, y se cierra el tiro de la chimenea, se beneficia totalmente el calórico, que es igual y acompasado y que no tiene los atropellamientos del cok en su combustión en los usos domésticos.
Este nuevo combustible tiene la ventaja que no se apaga, y cuando está para extinguirse se puede estivar tan bien, que resulta un rescoldo con calórico útil para muchas horas. Personas formales y entendidas que usan este combustible dicen que economizan un 40 por 100.
Los precios de este carbón, llevado á domicilio, al día siguiente de hacer el pedido —desde un quintal— por escrito ó por los teléfonos números 217 ó 508 son los siguientes:
Pesetas.
Aglomerado de cok, quintal castellano, 46 kilos 2,75
Idem vegetal, clase superior, ídem id 6,00
Idem de encina elegido, clase especial, id. id 9,00
Por mayor, desde 87 arrobas, equivalentes á mil kilos, cuesta el Aglomerado de cok 56,00
Idem vegetal, clase superior.. 124,00
Idem de encina, id. especial.. 180,00
Este carbón y el otro y el de más allá de la fábrica del paseo de las Acacias se lleva seco á domicilio y se garantiza su peso.
También se revende en la mayor parte de las carbonerías, y para concluir, se afirma que el aglomerado de cok es hasta hoy el mejor combustible y que en las mejores cocinas se han hallado grandes ventajas sin contar con la economía de 40 por 100 ya enunciada, y aunque sea doloroso decirlo, en todos los países un poco adelantados, desde hace mucho tiempo, no se gastan más que aglomerados, que quizás y sin quizás resulten hoy cosa nueva para muchos.
Bien valía la pena de entretenerse un poco hablando de un combustible que cuesta una peseta menos quintal que el cok, que calienta más y que dura también más, pero mucho más.